El Lenovo Tenerife visita este jueves al Joventut (Palau Olimpic de Badalona, 20:30 h.c. | Movistar Plus Deportes – dial 63) en la penúltima fecha de la fase regular de la Liga Endesa. Quinto partido en 14 días para un equipo, el aurinegro, que afrontará el reto consciente de las dificultades que acarrea, pero con la firme intención de sacar su versión más competitiva.
Para ello, los canaristas tendrán que hacer un nuevo ejercicio de resiliencia y sobreponerse a las bajas por lesión de Gio Shermadini, Aaron Doornekamp, Sasu Salin y Jaime Fernández; amén de hacer frente a un equipo siempre complicado en su cancha, con mucho oficio y talento en su roster, que intentará despedir su temporada en casa dándole una alegría a su afición.
La expedición tinerfeña sale a primera hora de esta tarde rumbo a tierras catalanas, con el vinculado Louis Riga y el júnior Mohamed Sangare entre los convocados. Los de Badalona, por su parte, aguardan con las ausencias por lesión de Pau Ribas y Tyler Cook; al tiempo que vuelven a tener disponible al base Andrés Feliz, que se perdió los últimos dos partidos por una fascitis plantar.
El Joventut, ya sin opciones de meterse en las series finales, es décimo en la clasificación, con un balance de 15/17 en el torneo doméstico; mientras que en la Eurocup cayeron eliminados en la eliminatoria de los cuartos de final por el París Basketball, a la postre campeón.
Solo desde la fortaleza colectiva atrás y del criterio y acierto en ataque podrán los tinerfeños tener opciones reales de victoria ante un adversario que hace cuatro jornadas vivía un cambio de técnico. Daniel Miret, un hombre de la casa y hasta ahora en tareas de ayudante, asumía el relevo de Carles Durán.
En su único partido como local, Miret estrenó su casillero de victorias: 96-90, ante el Básquet Girona; para luego caer en tres visitas de lo más complicadas ante Real Madrid (95-92), Granca (97-79) y Valencia (83-76).
La calidad de su tripleta de bases formada por André Feliz, Shannon Evans y Guillem Vives; el físico de Andrew Andrews; el hambre de élite de sus canteranos, con el júnior Michael Ruzic consolidado en la rotación y con Yannick Kraag cada vez con más protagonismo; las prestaciones de Pep Busquets (23 de valoración en el cruce de la primera vuelta); la versatilidad de Brodziansky al cuatro o el poder interior de Ante Tomic y Rubén Prey serán algunos de los aspectos a minimizar.
