Sin tregua. El Iberostar Tenerife afrontará este domingo otra cita de mucha exigencia. El grupo de Txus Vidorreta se mide al RETAbet Bilbao Basket, en la tercera entrega de la #FaseFinalExcepcional (La Fonteta, 14:30 hora insular, #Vamos, dial 8), apenas 40 horas después de haber caído ante el Kirolbet Baskonia (79-72).
Sin tiempo para lamentaciones, los tinerfeños tratarán de resarcirse ante un rival, que viene de caer en la prórroga con el Joventut de Badalona (79-86) y que ya fue capaz de ganar en la Isla, coincidiendo con la jornada inaugural de la actual campaña (67-81).
Los de Álex Mumbrú se ganaron a pulso la etiqueta de revelación hasta la interrupción de la fase regular del torneo, con un muy meritorio quinto puesto y un balance de 14/9, incluidos varios triunfos de mucho prestigio ante trasatlánticos como Real Madrid, Barça, Baskonia o Valencia.
Ya sin Axel Bouteille, fichado por el Unicaja Málaga poco antes de la Copa del Rey; ni Taylor Haws, que regresó a su casa en Estados Unidos durante la pandemia, los vascos contarán con el internacional belga Quentin Serron como novedad con respecto al cruce de la primera vuelta.
Además, andan pendientes de la reaparición tras su lesión de Jaylon Brown, que ya estuvo entre los doce convocados de ayer viernes contra el Joventut, aunque no llegó a jugar; y del estado físico del lituano Arnoldas Kulboka, cuyas molestias en la rodilla le han impedido debutar hasta ahora en la #FaseFinalExcepcional. Será baja segura el austríaco Thomas Schreiner, por un esguince de rodilla sufrido ayer.
El bilbaíno es un bloque muy bien trabajado, con los roles bien definidos. Tras 23 jornadas del torneo doméstico, eran el tercer mejor equipo en rebotes (26,6 por choque) y el segundo, tanto en tapones (3,52) como en mates (3).
El crecimiento de Jonathan Rouselle en la dirección; el oficio y calidad de Rafa Martínez o el buen hacer del tinerfeño Sergio Rodríguez en el perímetro; así como el poderío atlético de Lammers, Balvin y Sulejmanovic, una rotación plagada de centímetros, músculo y versatilidad, serán algunas de las bazas a contrarrestar.
Intentará el Iberostar Tenerife imponer su sello desde la fortaleza colectiva, partiendo de un buen trabajo atrás y circulando el balón con criterio y solidaridad para encontrar las mejores opciones de tiro posible, en busca de estrenar su casillero de victorias.
